Lo hemos visto en muchas películas, en estrenos de cine, en todas las revistas de estilo y lo seguimos viendo. Perrier Jouet Belle Epoque es el champagne que representa la elegancia del paso del tiempo, manteniéndose icónico e imbatible. Uno no puede evitar quedar impresionado por su extraordinaria botella; su diseño es un emblema de clase y refinamiento incomparables, precioso gracias a las anémonas japonesas del vanguardista Émile Gallé, bandera del Art Nouveau de principios del siglo XX Inspirada en la naturaleza como fuente de inspiración y madre de todos los proyectos. Un derroche de arte e iconicidad por dentro y por fuera.
Es importante el cuidado que siempre ha caracterizado los productos de la Maison; Perrier Jouet fue la primera empresa que quiso marcar el origen y la añada en sus botellas. En Belle Epoque el protagonista es el Chardonnay, en alto porcentaje, que aporta aromas florales. En boca es envolvente, sedoso y equilibrado. Una explosión de gustos. ¿Nuestro consejo? Maridado con pescado crudo y carnes blancas da lo mejor de sí.
